Dante Rafael Rivas Quijada, nació en Margarita, tiene 48 años, casado con una ciudadana ecuatoriana. Estudió geografía por muchos años en la ULA, donde se desempeñaba como beca trabajo con el cargo de vigilante de la residencia masculina. Esas becas estaban destinadas a los estudiantes de más bajos recursos. En aquellos tiempos militaba en la juventud de Acción Democrática que al momento presidia la FCU. Durante la campaña a la presidencia de la Federación de Centro de Estudiantes de la ULA, El Aissami suma a su equipo a Dante, con el fin de desarrollar el trabajo de proselitismo político en las residencias masculinas. Una vez conquistada la FCU por parte de El Aissami, Dante pasa a ser miembro de la FCU de la mano de El Aissami y recibe como tarea ir sacando de las residencias a los estudiantes regulares e ingresando miembros de sus incipientes colectivos, desplazando a los estudiantes regulares. Dichos colectivos amedrentaban y atemorizaban a toda la ciudadanía de Mérida en especial a la gran masa estudiantil opositora de esa pacífica ciudad. Entre el control de los colectivos armados y de las becas estudiantiles destinadas a los estudiantes más pobres, Dante Rivas, de la mano de El Aissami, se empoderó de amplios espacios físicos y burocráticos de la universidad.
Una vez El Aissami pierde la reelección de presidencia de la FCU por su incompetencia manifiesta y el manejo mafioso del cargo, frente a Nixon Moreno candidato opositor, Dante, se convierte en operador político de El Aissami a través de los colectivos armados creados por ellos y es una ficha fundamental en la conspiración para acusar falsamente a Nixon Moreno de violador. Aunado a esto iniciaron una campaña sediciosa para desestabilizar al estado Mérida y sabotear la gestión del Gobernador Florencio Porras, a quien querían suplantar.
Durante la gestión de TAE y sus compinches, Dante se desempeñó en otra misión que condujo a los ciudadanos al pánico silencioso: utilizar a los colectivos armados para invadir fincas productivas y así ponerse en los principales espacios generadores de riqueza del estado, desde los páramos productores de frutas, flores, hortalizas y lácteos, hasta tierras del sur del lago que son sin duda las mejores de nuestro país.
Con la llegada de El Aissami a la ONIDEX de la mano de Hugo Cabezas, es nombrado director de pasaportes siendo Dante Rivas su asistente personal. Nace entonces una mafia a la que se suma Feras El Aissami, hermano consentido de El Aissami , dedicándose entre otras cosas a vender pasaportes y triangular con CADIVI cupos de viajes al extranjero, previo cobro de sus respectivas coimas. Los hechos fueron denunciados y expuestos ante los medios de comunicación. A pesar de ello, El Aissami es nombrado jefe de la misión identidad y Dante Rivas jefe de pasaporte lo que le daba el poder de otorgar la nacionalidad a quien él quisiera. En este tiempo se escribe la parte más oscura de esa institución, El Aissami y algunos miembros de su familia, comienzan a negociar con sus cercanos radicales del medio oriente, para recibirlos en Maiquetía, darles pasaporte y permitirles quedarse en Venezuela o viajar como ciudadanos venezolanos a países del entorno geográfico de los EEUU, de esta manera se entiende que anden miles de personas que no hablan español circulando por el mundo, pero tienen documentos como venezolanos, alertando a las autoridades internacionales.
Ejemplo de tales acciones es Ghazi Nasr al Din, calificado como terrorista de Hezbolá, sobre quien pesa una investigación del FBI en los EEUU.
Una vez que sacan al 4F Pedro Carreño, El Aissami como Ministro del Interior, y Dante Rivas, como director del ONIDEX , presentaron al país con bombos y platillos el cambio del nombre a SAIME y el proyecto de digitalización de la cédula de identidad. Le asignaron 80 millones de dólares para tal fin, los desaparecieron con la misma habilidad con que hoy desaparecen 21 mil millones, todo ese recurso se desvaneció en un triángulo formado por Dante, El Aissami y la directora de proyectos especiales del Ministerio de Interior y Justicia, una de las muñecas de Tareck de entonces. Al empezar los escándalos públicos, Dante contrata a una prestigiosa firma de marketing para crearse una imagen de gran gerente público e ir penetrando el imaginario de la clase política gobernante y de los venezolanos en general. Es evidente que uno de los engañados fue el mismísimo Nicolás Maduro, que lo colocó en varios ministerios, sin percibir que era pieza fundamental de la traición de El Aissami.
En el 2013, El Aissami lo coloca como Ministro del Poder Popular para el Ambiente. Valdría la pena desarrollar una investigación judicial para determinar la magnitud del daño causado por Dante al frente de tal despacho con la venta de permisos y licencias para desafectar y explotar áreas protegidas y parques nacionales, colocándolos en manos de empresarios compinches del ámbito de la construcción y del turismo, en detrimento del medio ambiente de Venezuela. Aunado a esto, son muchas las vallas publicitarias de obras de ese ministerio, en tiempos de Dante, que anuncian la asignación de recursos para tal fin y que no dieron ni el primer paso para su cumplimiento. A la usanza de Luis Herrera nos preguntamos: ¿dónde están los reales?
Los compinches de El Aissami diseñan la propuesta de la autoridad única nacional de trámites y permisos, siendo dante Dante Rivas su primer presidente, y se ponen al frente de la mayor alcabala de la matraca nacional.
Llega Dante a la cartera de Comercio. Las licencias de importación se convirtieron en un negocio muy lucrativo, allí se hace de millones de dólares fáciles en diferentes ramos de la importación. Esto dentro del plan de El Aissami aseguró el control de gran cantidad de empresarios grandes, medianos y pequeños, que servirían luego a su misión de desplazar a Maduro del poder. Además, los compinches aprovecharon para organizar sendas estructuras comerciales y financieras que le dieran soporte a El Aissami en cualquier campaña electoral futura. No es casual que hoy esos compinches, presos unos, huyendo otros, y los más conspicuos paseando libres y orondos por Venezuela, estén rodeados de groseros lujos que ofenden a los pobres que merman de mengua.
Ejemplo de lo antes escrito fue la licencia de importación de motos otorgada a uno de los compinches, Felipe Contreras Caldera, que se convirtió en el dueño del monopolio importador del rubro. Una de sus agencias fue allanada en días pasados por funcionarios del SEBIN en la ciudad de Mérida, en el marco de la investigación de la corrupción en la CVG. Hoy Caldera está preso en El Helicoide.
Dante se va a ocupar cargo en el BCV, de la mano de nada más y nada menos que de su compinche Pedro Maldonado, hoy preso en El Helicoide. Como vimos en el capítulo de Pedro, allí se adueñaron del manejo de la política monetaria y de figuras creadas para la asignación de divisas como el DICOM, el régimen cambiario y los pagos en divisas a empresarios venezolanos y extranjeros. Estos hechos son investigados por organismos internacionales que han recibido denuncias de muchos empresarios que fueron sometidos a tal extorsión.
Dante es nombrado luego ministro para la pesca y acuicultura, en junio de 2018. Allí, al igual que en el ministerio de comercio, se dedicó a vender licencias de pesca y permisos para tal oficio, sin importar que se tratara de pescas de arrastre que dañaron irreversiblemente el lecho marino, y especialmente en Sucre, dejando sin trabajo a cientos de pescadores artesanales que son los que proveen el mercado nacional del 75% del consumo de pescado, sin la más mínima consideración a un estado de por si empobrecido y abandonado. Ese mismo año, Erwin Rojas es impuesto en la gobernación de Sucre y El Aissami inicia su operación para controlar la ruta del narcotráfico hacia el Caribe. No es casual, que en el 2020, Mark Esper, secretario de Defensa de los EEUU, lanzó una operación contra el narcotráfico en el Caribe, orientada hacia las costas de Sucre. Fueron varios los alijos capturados ese año en diversos operativos del Comando Sur. Todo esto ocurre posterior al señalamiento, por parte de la administración Trump, de Maduro y algunos miembros de su régimen como narcotraficantes.
El Aissami convence a Maduro y envían a Dante como candidato a la gobernación de Nueva Esparta, a pesar de que ya había perdido la alcaldía de Porlamar. Las tareas de Dante en la isla, impuestas por El Aissami eran controlar todo el comercio y las finanzas a través de sus socios y amigos árabes; y obtener una nueva fuente de financiamiento para sus operaciones políticas en gobernaciones y alcaldías a nivel nacional. Tal movimiento, les permitía ganarle espacio a Diosdado Cabello en las filas del PSUV. Margarita es “pueblo pequeño” y, como tal, un espacio donde los secretos se gritan en plazas y comederos. Por tal razón, toda la isla se enteró de los grandes negocios de Dante para adueñarse de las mejores playas con sus restaurantes y hoteles, haciendo obras que destrozaron el ambiente sin control de ningún organismo capaz de enfrentarse a tan poderoso delfín. Mostró una riqueza insultante y se apoderó de terrenos baldíos muy valiosos. Los margariteños, que conocen el origen pobre de Dante, se preguntaban de donde salía tal riqueza, y es así como pierde la alcaldía, luego la gobernación. ¡Sin duda engañó a Maduro, pero no a los margariteños!
Lea también: