La Heladería de Los 1000 Sabores, conocida popularmente como la Heladería Coromoto, es un lugar icónico de la ciudad de Mérida donde propios y visitantes degustan las creaciones más particulares de helados.
Jesús Quintero // Corresponsalía lapatilla.com
Con sabores de pasta, caraota, doritos, cubalibre, ajo, queso, rosas, café, auyama, salmón, y los tradicionales de fresa, mantecado, chocolate, por nombrar algunos de los que en vitrina se muestran, están a disposición de los comensales.
La idea del inmigrante portugués Manuel Da Silva dejó en esta urbe un legado memorable, que a pesar de su muerte algunos años atrás, hoy sigue deleitando paladares.
Su hija Isbelis Da Silva y su familia mantienen vivo este negocio en una ciudad donde es parada obligatoria para los turistas que visitan a esta región andina.
La Heladería 1000 Sabores tiene dos Guinness World Records como la tienda de helados con más sabores.
El primero lo recibieron en el año 1991 por 368 sabores y luego en 1996 por 593 sabores.
Cientos de personalidades del mundo del espectáculo han visitado este lugar, donde la familia de Manuel Da Silva Oliveira, sembró en Mérida una tradición de más de 40 años.
La heladería ha tenido que cerrar sus puertas por un tiempo determinado.
En una ocasión fue por la escasez de leche, materia prima para la preparación de los helados, y también mientras duró la cuarentena por la pandemia del Covid-19.
Sin embargo, a la fecha el negocio de Manuel Da Silva, que ahora gerencia su hija, sigue siendo un punto de reencuentro en la ciudad de Mérida, que no pierde su magia y se deja envolver con la neblina al caer la noche, mientras se degusta un delicioso helado de la famosa heladería Coromoto.