Luego de que Corposalud confirmó que el Ambulatorio Tipo III de Delicias, municipio Rafael Urdaneta, fue desalojado por graves problemas estructurales ocasionados por una falla geológica, el habitante de la localidad fronteriza del Táchira, Eduardo Espinel, denunció que este centro asistencial lleva 10 años deteriorándose.
Anggy Polanco // Corresponsalía lapatilla.com
El residente de Delicias expuso que el municipio Rafael Urdaneta además depende de la red ambulatoria de Junín, pese a que ya esta jurisdicción es un municipio plenamente constituido con un importante número de habitantes. Si en el Hospital Padre Justo Arias de Rubio no sobran medicinas, a Delicias no llega nada, dijo.
Señaló que desconocen si la alcaldía o las autoridades de Corposalud han desarrollado un plan para reconstruir el ambulatorio rural.
Contó que los residentes de Delicias y aldeas adyacentes, que poseen la nacionalidad colombiana, deben acudir al corregimiento de Colombia, Ragonvalia, situado a unos 20 minutos de la población tachirense, para recibir atención médica.
Y los que no tienen cédula colombiana, deben dirigirse a la capital del municipio más cercano, que es Rubio, al momento de tener una emergencia. Si ese es el caso, deben desplazarse durante casi dos horas.
Adicionalmente, Espinel refirió que la casa de las bases de misiones que está acondicionando Corposalud para transferir las funciones del centro asistencial, no está apta para brindar una atención de calidad, pese a que en el municipio cuentan con un buen recurso humano. Allí no cuentan con los equipos necesarios para atender casos de partos y cesáreas, entre otras emergencias.