SpaceX lanzó esta mañana el primer vuelo de prueba de Starship, el cohete más potente jamás construido, pero tras su despegue explotó en el aire, frustrando el objetivo de orbitar la Tierra durante 90 minutos para marcar un hito en el camino hacia los viajes interplanetarios. Elon Musk estaba mirando el momento desde el control.
Por: TN
El lanzamiento tuvo lugar a las 10.35 hora de Argentina, en medio de gritos y aplausos de la multitud que se congregó en el puerto espacial privado Starbase, ubicado en las cercanías de Boca Chica, Texas, en Estados Unidos. Pero pocos minutos después de su lanzamiento, el cohete explotó en el aire separándose antes de lo previsto. Fue el segundo intento para concretar la prueba de vuelo, luego de la suspensión en los últimos segundos de la cuenta regresiva, el pasado lunes.
En el momento de la explosión, Elon Musk no pudo contener la cara de decepción por el intento fallido de lanzamiento un cohete que insume un presupuesto aproximado a los 2.000 millones de dólares y que se esperaba recuperar.
Pero inmediatamente después, recurrió a su propia red social, Twitter, para felicitar a su empresa SpaceX y prometió un nuevo lanzamiento dentro de unos meses.
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