Miles de fieles acudieron este sábado a las mezquitas de Indonesia, el país con más musulmanes del mundo, para marcar con rezos comienzo del fin del Ramadán, el primero sin restricciones desde el fin de la pandemia.
Largas filas de creyentes se colocaron al alba para iniciar los rezos en la noroccidental provincia de Aceh, donde las autoridades aplican la sharia o ley islámica -a diferencia del resto del país-, así como en otras partes como Yakarta, según imágenes de EFE/EPA.
El fin del Ramadán, declarado el jueves por el Ministerio de Asuntos Religiosos indonesio, es el mes sagrado del ayuno musulmán y la festividad más importante de Indonesia, el cuarto país más poblado del mundo con unos 267 millones de habitantes repartidos en 17.000 islas.
Cerca del 88 % de indonesios son musulmanes, en su mayoría en su versión moderada, aunque existen minorías significativas de otras religiones como el hinduismo, budismo y la católica.
Esta festividad, que supone el mayor éxodo entre los pobladores del país a sus regiones natales para celebrar con sus familiares, son las primeras que se organizan sin restricciones a raíz de la crisis sanitaria, que golpeó con fuerza al archipiélago indonesio.
En 2020 y 2021, se implementaron prohibiciones de movimiento, mientras que el año pasado se pudo viajar con libertad, pero permanecía vigentes los límites de aforo en los recintos religiosos.
La comida es parte fundamental durante la celebración, que tienen una duración de tres días, con muchas familias celebrando el final del ayuno obligatorio con grandes desayunos con platos tradicionales.
En Malasia, el segundo país con mayor presencia musulmana del Sudeste Asiático y donde el islam es la religión de casi 20 millones de habitantes -el 60 % de la población-, los musulmanes acudieron en masa a las mezquitas de Kuala Lumpur, entre otras urbes.
En el Sudeste Asiático, además de los citados países, en Brunéi el islám es la religión oficial, mientras que otras naciones como Tailandia y Filipinas cuentan con un buen número de habitantes musulmanes y en menor medida Singapur, Camboya y Birmania.
EFE