Los testimonios de las víctimas de la represión y tortura chavista ante la CPI, son desgarradores, espeluznantes, duelen en el alma las versiones de cada una de las víctimas, que narran testimonios de una dura y cruel realidad, en la que el régimen criminal es el autor que ha generado con desmedida maldad esos daños irreversibles y lo hace de manera permanente, con sadismo, mounstrosidad, por el solo hecho de disentir de él. Y esas prácticas crueles e inhumanas del régimen perverso, depravado y corrupto las ha tomado como una practica continua que cada día intensifica mucho más alcanzando una exacerbada cifra de más de 270 presos políticos, a los que tiene sometidos bajo esos despiadados maltratos y tratos inhumanos, una práctica que usa para atemorizar, intimidar y amilanar a todo aquel que no comulgue con sus dogmas. Actualmente entre civiles y militares, esa es aproximadamente la cifra, 270 presos políticos, que son presos de pensamientos, presos de conciencia, presos que bajo ninguna norma han cometido algún delito, sino por el solo hecho de que sus ideas suponen una amenaza, un desafío para el régimen, pues el régimen criminal teme que se le opongan, que difieran, y teme tanto que la atrocidad con la que ha actuado es indescriptible.
Son innumerables los presos políticos, pero podríamos nombrar algunos como, Javier Tarazona, defensor de DDHH, Roland Carreño, comunicador social, el Coronel Oswaldo García Palomo, el Teniente coronel Igbert Marín Chaparro entre muchos otros, víctimas de maltratos, de vejaciones, de daños de toda índole como lo contempla el informe que reposa en la CPI, la situación es tan de alta gravedad que a muchos le han cegado la vida, asesinandolos en las sedes donde se encuentran secuestrados, como lo hicieron con Rodolfo Pedro González , Carlos Andrés García, el teniente del Ejército Rafael Arreaza, Fernando Albán, Nelson Martínez, el capitán Rafael Acosta Arévalo, Virgilio Jiménez, Pedro Pablo Santan, el indígena Salvador Franco, el policía Gabriel Medina y el General Raúl Isaías Baduel. Son incontables los casos de presos que han perdido la vida. Recientemente “murió” Leoner Azuaje, que aunque no era considerado preso político, era un detenido por corrupción, ya que también el régimen utiliza detener a muchos por presunta corrupción para lavar sus manos y aparentar que lucha con ese flagelo y que por supuesto son detenidos sin las condiciones mínimas y sin el resguardo de sus derechos y garantías fundamentales. Bajo esas violaciones Leoner Jesús Azuaje, apareció “muerto” en custodia del Estado.
Esto demuestra una vez más el talante criminal del régimen encabezado por Nicolás Maduro, el cual es hoy en día junto a otros de su cadena de mando imputado por crimenes de lesa humanidad. Así mismo han desaparecido y ajusticiado a miles de ciudadanos, Hugo Marino, es uno de esos desaparecidos, y el régimen se niega a dar respuesta a sus familiares de dónde se encuentra. Está claro que el terrorismo de estado es una de las estrategias principales para permanecer en el poder cueste lo que les cueste. Nicolás Maduro y su régimen no son simples adversarios, ellos son nuestros verdaderos enemigos, odian a la verdadera oposición, a todos los que disienten de ellos.
Ahora bien, todos sabemos que en Venezuela no hay estado de Derecho, en consecuencia no hay justicia, todo el poder esta concentrado en Maduro y su cúpula criminal. El poder judicial, no escapa de ello y va a la par de las maliciosas acciones del régimen, esté actua a su medida, concediendo cada capricho malicioso y perverso de la banda criminal que ostenta el poder. Por otra parte el CNE, también al igual que el poder judicial es una institución totalmente controlada por el régimen, lo que está más que demostrado por el largo historial de elecciones fraudulentas realizadas a lo largo de estos 24 años en el poder, es más que claro que es una entidad al servicio de Maduro, como también lo es el poder judicial y todos los poderes, también del poder electoral el régimen se ha servido para facilitar su único fin, que no es otro que la permanencia en el poder, dándose asi un manto de legalidad ante el mundo.
De manera que así las cosas, entonces nos preguntamos, cómo es que a un régimen con estas características se le puede pedir que actúe o intervenga por intermedio de este CNE en un evento electoral exclusivo de la oposición, como los son las primarias del 22 de octubre de este año 2023. ¿Cómo es eso? ¿Por qué? Qué hay detrás de eso. ¿Cuál es el interés?. Por qué no reeditar el proceso del 16 de Julio del 2017 donde participaron más de 7.000.000 venezolanos dentro y fuera del país, donde demostramos que la sociedad civil organizada puede desafiar al sistema y lograr resultados confiables.
Será que permitiendo la participación del CNE , podría excluirse la participación de algún candidato. Mucho cuidado con esto señores de la Comisión Nacional de Primarias, mucho cuidado.
Cómo permitir a estas alturas que Nicolás Maduro, los hermanos Rodríguez (Jorge – Delcy) Diosdado Cabello y toda la cúpula del régimen nos cuenten nuestros votos. Esto sería entregar todo de una vez para el 2024. Se perdería una gran oportunidad y cuidado si la última, para conseguir el cambio de verdad, para conseguir la libertad que tanto anhelamos.
Permitir la participación del régimen mediante el CNE es un acto de verdadera traición a los venezolanos que vemos en este evento de las primarias una gran oportunidad para abrir el camino a la libertad y que el 2024 sea el año del cambio de verdad, el año en que comenzaremos a regresar a nuestro país todos los ciudadanos que por una y otra razón nos vimos obligados a salir de él, para juntos todos reconstruir nuestra gran Venezuela, hoy destruida, saqueada por el régimen criminal.
Al Dr Casal y a todos los integrantes de la Comisión Nacional de Primarias, quiero señalarles que reposa en ustedes la responsabilidad de las primarias, está en ustedes que las mismas sean verdaderas, para que el 2024 sea el año del cambio real, sea el año de la libertad. Ustedes tienen el deber patriótico de no permitir ninguna participación del régimen en las primarias del 22 octubre, esa es la exigencia de más del 82 % de los venezolanos, esté es un momento único para el verdadero cambio político en Venezuela y ustedes con su conducta serán factor muy importante en ese cambio. Ustedes tienen que entender que este es un acto exclusivo de la oposición y donde no tienen cabida nuestros enemigos, si, así lo ratifico, son nuestros enemigos, porque no pueden ser amigos o simples adversarios quienes han asesinado, encarcelado, torturados , desaparecidos a ciudadanos simplemente por disentir, no pueden ser simplemente adversarios quienes han hecho que más de 7 millones de venezolanos hayan huido de nuestro país buscando calidad de vida, presente, futuro.
Permitir que el CNE intervenga en las primarias del 22 octubre, sería un acto de verdadera traición a los ciudadanos, a las víctimas de la represión y torturas por parte del régimen, a nuestros presos políticos, a los familiares de los asesinados, a los que sufren las miserias y penurias de un régimen depredador y malvado simplemente por disentir, reclamar sus derechos, pero sobretodo por reclamar la libertad de nuestra Patria querida, es traicionar a toda esa diáspora venezolana cuya mayoría quiere o mejor dicho queremos regresar a nuestro país para todos juntos reconstruir nuestra Venezuela amada y hacer de ella un país Tierra de Gracia.