Nelsy Blanco, empresario y dueño de Altum, el primer restaurante aéreo de Venezuela, ha explicado en una entrevista con la periodista Shirley Varnagy las razones detrás del cierre indefinido del negocio. A pesar de los rumores de que el alto precio del servicio fue el detonante de la decisión, Blanco ha negado que ese fuera el caso, y ha señalado que actualmente hay demasiadas opciones en el mercado gastronómico.
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“Hubo un período en el que estuvimos adaptándonos al tipo de negocio, que no resultó fácil. Comenzamos con un precio que consideramos que era el justo debido a la cantidad de gastos operativos; arrancamos con un precio de 180 dólares por persona, eso duró un par de semanas, después bajamos a 140, ahí estuvimos dos semanas más y, al ver que la gente tampoco reaccionaba, hicimos un par de paquetes más económicos, pero consistían en que comías y bebías menos para hacerlo más accesible. La experiencia era la misma pero la comida y la bebida era diferente”, contó.
Blanco ha explicado que durante la fase inicial del negocio, intentaron ajustar los precios para atraer a una mayor cantidad de clientes, pero la realidad es que solo pudieron atraer a un promedio de 14 personas por día, mientras que habían planeado para un mínimo de 50 para mantener las operaciones. Aunque se habían adaptado al modelo de negocio y habían reducido los precios, la gente simplemente no estaba interesada.
El empresario también ha reconocido que subestimaron el impacto del miedo a las alturas en las decisiones de los clientes. A pesar de haber dividido a los clientes en dos grupos, los que tenían miedo y los que no, muchos simplemente no se sentían cómodos con la idea de comer y beber en una plataforma elevada. Además, el negocio tenía costos operativos muy altos, especialmente debido al alquiler de la grúa utilizada como base para la plataforma.
A pesar de haber sido una experiencia decepcionante para el dueño y los empleados, Blanco ha expresado su gratitud a aquellos que realmente disfrutaron del restaurante, y ha explicado que la suspensión del negocio es solo temporal hasta que la temporada de lluvias pase y las condiciones mejoren. Aunque no hay planes de volver a abrir Altum en el futuro cercano, el empresario seguirá buscando nuevas oportunidades de negocio.