Con el propósito de establecer un modelo innovador de desarrollo sostenible, de adaptación climática y de sensibilización ambiental que permita a la comunidad escolar afrontar los problemas ambientales y energéticos que les afectan, el equipo de Lata de Agua concibió la primera escuela sostenible de Venezuela ubicada en la Unidad Educativa María Virgen Misionera, en Valencia, estado Carabobo. Esta primera experiencia de escuela sostenible en Valencia está fundamentada en una serie de ecotecnias, innovaciones tecnológicas y programas de sensibilización diseñadas con la finalidad de preservar y restablecer el equilibrio entre la naturaleza y las necesidades humanas, para que los niños y los miembros de la comunidad escolar puedan conocer y aprender de estas tecnologías y las puedan utilizar para proveerse de unas condiciones ambientales mucho más armónicas Para el arquitecto, fundador y director de Lata de Agua, Laurencio Sánchez, la escogencia de esta comunidad escolar -para desarrollar este proyecto- tiene que ver por la cercanía con el Lago de Valencia debido a que las condiciones en las que se otorga agua a toda la región central no son idóneas con relación a la calidad del agua.
El problema de la cuenca del Lago de Valencia es uno de los problemas ambientales más importantes en toda la región latinoamericana. “Estos son escenarios que se van a agravar en el futuro para estos niños y una escuela sostenible es acceso a la tecnología, al conocimiento y a la sensibilidad. Es un reconocimiento de su ecosistema local para que puedan ser ciudadanos muchos más empáticos con sus entornos, que va a redundar en una mejor calidad de vida en su edad adulta”. El proyecto Escuela Sostenible Lata de Agua se realiza gracias al apoyo de la Embajada de Francia en Venezuela, en el marco del apoyo del gobierno francés al fortalecimiento de la sociedad civil venezolana a través del programa “Proyectos Innovadores de la Sociedad Civil y Coaliciones de Actores” – PISCCA. Este trabajo se desarrolla en alianza con la comunidad escolar, la organización Arqbiental y la asociación ABC Prodein. “La crisis climática y de la biodiversidad son hoy el principal desafío para nuestro mundo, cada vez más interdependiente. Para Francia y su diplomacia, se trata de un tema de movilización absoluta a todos los niveles. Por ello, es un orgullo para nuestra Embajada poder contribuir a proyectos concretos liderados por la sociedad civil venezolana y que cambian la vida de las comunidades, como lo es Lata de Agua.” Romain Nadal, Embajador de Francia en Venezuela.
En la unidad Educativa María Virgen Misionera se está instalando: un sistema Lata de Agua de suministro a partir de la captación, tratamiento y almacenamiento de lluvia para mejorar la calidad de agua en la escuela.
Pozos de infiltración para reducir las inundaciones de la escuela, recargar acuíferos y humedecer el suelo. Un calentador solar de agua para surtir de agua caliente a la cocina y las duchas de la escuela, un sistema fotovoltaico para refrigerar alimentos del comedor escolar y energizar la bomba de agua del sistema Lata de Agua. En paralelo a estas acciones, también, se promueven actividades de sensibilización, educación y concienciación con:
El programa Llueve y Aprendo para sensibilizar hacia el cuidado del medio ambiente, el uso de energías alternativas, el reciclaje y adaptación climática.
Un mural con un diseño alusivo al desarrollo sostenible. Un manual docente para escuelas sostenibles, que pueden usar todas las escuelas del país. “Las escuelas sostenibles, como nosotros las concebimos en Lata de agua, son lugares donde se enseña desde la práctica, desde la acción local de sus habitantes y la toma de decisiones en el entorno. Es dar herramientas a los niños que más adelante serán ciudadanos, para adaptarlos al cambio climático”, explica Laurencio Sánchez. Con esta iniciativa se beneficiarán más de 1.300 alumnos, más de 50 trabajadores de la escuela y los adultos mayores de la comunidad aledaña. Esta iniciativa, que comenzó en octubre de 2022, está enmarcada en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y en el artículo 107 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela que establece la educación ambiental como obligatoria en los niveles y modalidades del sistema educativo, así como también en la educación ciudadana no formal.
Este proyecto le da continuidad al trabajo que está realizando Lata de Agua con foco en las escuelas y comunidades para promover el modelo de suministro de agua a partir de la recolección de agua de lluvia. La primera iniciativa se desarrolló en Barrio Nuevo, en el año 2020, con la instalación del sistema Tinajero Lata de Agua en las escuelas EBN-Pedro Felipe Camejo, el CEIN Fermín Toro y en el ambulatorio Las Casitas. Además, se instalaron en cada escuela lavamanos, que funcionan con agua de lluvia, para prevenir el COVID.19. Posteriormente, en el año 2022, se inauguró el Tinajero Agrícola en la Escuela Nuestra Señora del Encuentro en el Mirador del Este. Ambas intervenciones fueron realizadas en el sector popular de Petare, en Caracas, también con el apoyo de la Embajada de Francia. Lata de Agua es un proyecto de innovación social que ofrece un modelo de suministro de agua alternativo y sustentable a partir de la captación, almacenamiento y tratamiento del agua de lluvia en Venezuela. El modelo ofrece más y mejor agua a comunidades vulnerables en distintas regiones del país durante al menos siete meses al año. Se trata de una solución armónica y respetuosa con el medio ambiente al grave problema de escasez del agua en Venezuela, involucrando a las comunidades en la solución de sus problemas hídricos.