Aunque cueste creer que el agua sacada de un pozo en pleno centro de Barinitas, municipio Bolívar de Barinas, lo administra la alcaldía y solo beneficia a quienes la venden en cisternas, los vecinos siguen partiéndose el lomo buscando un lugar para llenar un tobito.
Corresponsalía lapatilla.com
Todo esto pasa mientras el acueducto del río El Pagüey sigue en reparación, porque sus tuberías fueron dañadas por una crecida durante las lluvias, y todavía no ha habido un plan de contingencia para garantizar el suministro en las comunidades.
Las cisternas son privadas y cobran un mínimo de 20 dólares, por lo que las personas andan rebuscando en el pueblo para tener agua.
“¿Quién es el responsable de esta tragedia?”, es la pregunta que se hace el concejal Janner Bastidas, quien encuentra respuestas solo en la corrupción que el mismo Nicolás Maduro denunció como el desfalco de Pdvsa.
“Allí fueron tres millardos de dólares”, recuerda el concejal, al precisar que con solo siete millones de dólares pudieron haber construido un acueducto metropolitano en Barinitas, resolviendo así el problema de suministro que tiene muchos años.