El robo a mano armada de la joyería Piaget en París es el último de una serie de robos de joyerías de lujo en la ciudad. El 29 de abril, tres individuos a bordo de dos motocicletas entraron en la joyería Bulgari, en Plaza Vendôme, y se llevaron un botín estimado en “varios millones de dólares”. En 2015, un asaltante disfrazado de anciano entró en la joyería Cartier de Cannes, en la Costa Azul, y se llevó un botín estimado en 17,5 millones de euros.
El mayor robo de la historia contra una tienda de joyas en Francia ocurrió en diciembre de 2008 cuando un grupo de hombres armados, algunos de ellos disfrazados de mujer, atracaron la tienda Harry Winston. En 20 minutos los asaltantes se llevaron 104 relojes y 297 joyas valorados en cerca de 71 millones de euros.
Estos robos son un recordatorio de que las tiendas de joyas de lujo son un objetivo atractivo para los ladrones. Las joyas son fácilmente transportables, tienen un alto valor y pueden ser vendidas fácilmente en el mercado negro. Las tiendas de joyas de lujo deben tomar medidas para proteger sus escaparates y sus empleados. También deben trabajar con la policía para compartir información sobre los ladrones y sus métodos.
El robo a mano armada de la joyería Piaget en París es un recordatorio de que la delincuencia no es exclusiva de los barrios pobres. Los delincuentes están dispuestos a atracar tiendas en las zonas más ricas de la ciudad. Las personas que viven o trabajan en estas zonas deben estar conscientes de su entorno y tomar medidas para protegerse.
Con información de AFP