El caso de la tercera inculpación penal de Donald Trump será quizá el más importante de la historia de Estados Unidos y de la carrera de la jueza Tanya Chutkan, quien ha dictado algunas de las sentencias más duras contra simpatizantes del expresidente en casos sobre el ataque del 6 de enero de 2021 al Capitolio.
A Chutkan, de 61 años, se le asignó la supervisión del juicio histórico del presidente número 45 de Estados Unidos por cargos de conspiración para revertir el resultado de las elecciones de 2020 que ganó el demócrata Joe Biden. Fue designada al azar.
Chutkan y Trump se cruzaron hace dos años cuando este último presentó una demanda afirmando que como presidente podía no entregar documentos a un comité del Congreso que investigaba el ataque al Capitolio por parte de sus partidarios.
Trump ya no era presidente en ese momento y Chutkan, en su fallo, rechazó la demanda diciendo que su argumento “parece estar basado en la noción de que su poder ejecutivo ‘existe a perpetuidad'”.
“Pero los presidentes no son reyes y el demandante no es presidente”, escribió Chutkan.
Algunos de los registros y archivos de la Casa Blanca que Chutkan ordenó que se publicaran se usaron como pruebas en la acusación penal de 45 páginas presentada contra Trump el martes por el fiscal especial Jack Smith.
Las juicios por el ataque al Capitolio se han llevado a cabo en Washington, y Chutkan, que ha presidido casi tres decenas de estos casos, ha dictado algunas de las sentencias más duras.
En diciembre de 2021, la magistrada condenó a un partidario de Trump a cinco años de prisión por agredir a policías en el Capitolio, la sentencia más dura hasta ese momento.
“Debe quedar claro que tratar de derrocar violentamente al gobierno, tratar de detener la transición pacífica del poder y agredir a los agentes de la ley en ese esfuerzo” lleva aparejado “un castigo”, dijo.
– Nacida en Jamaica –
Según un recuento del Washington Post, a mediados de junio Chutkan había sentenciado a 31 acusados a penas de prisión.
Trump, el favorito para la nominación presidencial republicana de 2024, comparecerá el jueves ante otro juez en Washington. Después el caso pasará a Chutkan.
Nacida en Jamaica, esta jueza fue designada por el expresidente demócrata Barack Obama y confirmada por unanimidad (95-0) por el Senado en junio de 2014.
Según su biografía oficial, es licenciada en economía por la universidad George Washington y en derecho por la de Pensilvania.
Tras trabajar tres años en un bufete de abogados pasó a ser abogada de oficio de la ciudad de Washington, donde pasó los siguientes 11 años.
Después integró el bufete de abogados Boies, Schiller & Flexner, donde trabajó otros 12 años antes de ascender a jueza federal. AFP