La ONG Amnistía Internacional hizo una denuncia preocupante sobre la situación del ingeniero venezolano Guillermo Zárraga, quien lleva más de dos años detenido arbitrariamente por el régimen de Nicolás Maduro bajo cargos de “terrorismo”.
La organización solicitó atención médica inmediata, acceso a medicamentos y alimentos, además de exigir su liberación o el respeto de sus derechos humanos mientras se encuentre bajo custodia del Estado.
En un comunicado dirigido a la ministra para el Servicio Penitenciario de la dictadura chavista, Celsa Bautista, Amnistía Internacional expresó su preocupación por la vida de Zárraga, la cual está en peligro debido a la negativa de las autoridades penitenciarias de garantizarle unas condiciones de reclusión dignas y su integridad física.
Las condiciones inhumanas de reclusión y la falta de nutrición adecuada han provocado un grave deterioro en la salud de Guillermo Zárraga.
En los últimos meses, ha perdido alrededor de 20 kilos y sufre de problemas cardíacos que le causan desmayos frecuentes.
A pesar de esto, los funcionarios bajo el régimen de Maduro se han negado a brindarle cualquier tipo de tratamiento médico y le han prohibido recibir visitas de sus familiares.
Según Amnistía Internacional, Zárraga fue detenido y acusado basándose en pruebas falsas o inexistentes. Además, se le negó el acceso a asistencia legal confiable y fue coaccionado para que admitiera los presuntos crímenes de los que se le acusaba.
La detención de Zárraga ocurrió después de que el régimen venezolano afirmara que un “ataque terrorista” había causado una explosión en una torre del complejo petrolero de Amuay, en el estado Falcón. Además de su papel como líder sindical, se le acusó de respaldar actos de sabotaje debido a una fotografía en la que aparece junto a Juan Guaidó, reconocido líder opositor.
La embajada de Estados Unidos en Venezuela ha expresado su apoyo a Zárraga y ha denunciado que la acusación en su contra es una farsa que viola sus derechos humanos.
Además, señalan que la responsabilidad de la mala gestión y corrupción en PDVSA recae en el régimen de Maduro y no en el líder sindical.
El régimen de Nicolás Maduro ha sido acusado constantemente de hostigar, procesar y censurar a activistas y organizaciones que defienden los derechos de la población venezolana en medio de una compleja emergencia humanitaria y una profunda crisis de derechos humanos.
Esta situación ha llevado a millones de personas a abandonar el país en busca de mejores condiciones de vida.
Con información de REUTERS