Este jueves, un grupo de obreros contratados por la alcaldía chavista del municipio Sucre de Barinas, estaba lanzando piedras al hueco dejado por las corrientes del río en el muro de contención, en el inicio de la reconstrucción.
Corresponsalía lapatilla.com
Las labores están a cargo de Ingeniería Municipal, sobre quienes pesa la obra desde el principio, cuando hace poco menos de un año tras la vaguada se inundaron varios barrios y viviendas de Socopó.
El abogado José Gregorio Martínez abogó por la presencia de una contraloría social, que sin coacción ni sometidos a partidos políticos, puedan verificar día a día la calidad de la obra, de la cual depende la integridad de muchas personas.
Martínez recordó que fue el mismo régimen chavista que estableció la conformación de la contraloría social, “aunque no le guste al ministro Jorge Arreaza y al alcalde Salvador Guerrero, pero les digo que eso es ley”.
De la misma forma que fue utilizada mano de obra no calificada para confiarle esta obra desde el principio, de la que Arreaza y Guerrero aseguraron que no hubo empresa contratista, Martínez cree conveniente entonces que las personas que corren riesgo de ser afectadas nuevamente por el río, deben tener la oportunidad de reclamar materiales para una estructura sólida.