Laura Sofía Amaya, era una joven madre colombiana de 23 años que vivía en España y se trasladó a hasta Bogotá para practicarse una lipoescultura, según informó Noticias Caracol.
Gabriela Duarte, prima de Laura Sofía, señaló que la joven pagó siete millones de pesos (unos 1.700 dólares) por esta cirugía estética. Lamentablemente, murió en el procedimiento.
“Esta mujer la cita el viernes 15 de septiembre, Sofi llega a las 10 de la mañana, la cirugía tenía que terminar a la 1 de la tarde. La cirugía se complicó. Sofi empieza a convulsionar, hubo un descuido de esta supuesta cirujana, pues Sofi se les cayó de la camilla, las convulsiones empeoraron y al final la mujer decide llevarla a la Clínica Olaya, pero llegó allí con los signos muy bajitos. La reanimaron, la entubaron, pero Sofi no sobrevivió”, contó.
Gabriel argumentó que su prima Laura Sofía Amaya se practicó la lipoescultura en dicho lugar por recomendación de varias conocidas que se había operado allí.
“Nosotras dimos con ella porque muchas conocidas se habían operado con Brenda Celeita (la mujer que hizo el procedimiento). Los resultados al inicio eran geniales, ellos se hacían notar mucho por redes sociales. Ella se nos presentó a nosotros como médica esteticista profesional, entonces nosotras confiamos. Nos convenció, nos dijo que no pasaba nada. Eso no era una clínica, era un local”, explicó.