Un personaje olvidado ha vuelto a la palestra virtual con sus “dotes artísticos” y su peculiar historial. Luis Felipe Acosta Carlez, el exgobernador chavista del estado Carabobo, ha resurgido de las profundidades gracias a su no tan melodiosa interpretación en piano acompañada por su voz celestial… y sus sonidos algo célebres.
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Este general retirado, que alguna vez protagonizó un bochornoso episodio en la planta embotelladora de Coca-Cola, ha vuelto a capturar la atención del público. Recordemos ese fatídico día de enero de 2003, cuando Acosta Carlez decidió irrumpir en la planta como si de un concierto privado se tratara. Aprovechando la ocasión, el ahora pseudomúsico no pudo resistirse a una malta bien fría y, con la naturalidad de un virtuoso, protagonizó un dueto con sus burbujas estomacales.
Los presentes, atónitos, observaban cómo el exgobernador mezclaba sus talentos con el arte del eructo, generando una sinfonía que dejó perplejos hasta a los más experimentados melómanos.
Así, Luis Acosta Carlez, el maestro de las teclas y las burbujas, se consagra como un “prodigio” que nunca supimos que necesitábamos. pero ¿dónde se le da peor? ¿eructando o cantando y tocando piano?