La Fiscalía ha solicitado al tribunal que juzgará a Dani Alves, denunciado por una mujer que le acusa de haberla agredido sexualmente en el baño del reservado de la discoteca Sutton de Barcelona la noche del 30 de diciembre de 2022, cuando ella tenía 23 años, que la presunta víctima declare con medidas de protección para que no sea posible su identificación.
De aceptarse la solicitud del Ministerio Público, la joven podría testificar durante la vista separada de los presentes en la sala por una mampara o incluso desde otra sala ajena a la de vistas y con medios para distorsionar su voz y evitar, de este modo, una doble victimización durante el proceso, que comenzará el próximo 5 de febrero en la Ciudad Condal.
Se trata de una petición que llega después de que la madre del futbolista, Lucía Alves, compartiese el pasado 30 de diciembre, justo cuando se cumplía un año de los hechos denunciados y que tienen al jugador brasileño en prisión provisional desde el 20 de enero en la cárcel de Brians 2, un vídeo en Instagram editado con música y comentarios donde se puede ver a la joven disfrutando y en celebraciones con sus amistades y familia. Unas imágenes que se habrían extraído de las redes sociales de la mujer y que podrían datar incluso de cuando esta era menor de edad.
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