El sábado 6 de enero y por segundo año consecutivo, la comunidad Sorocaima se llenó de alegría y emoción al celebrar la llegada de los Reyes Magos.
Por Ana C. Guaita Barreto / Corresponsalía lapatilla.com
Esta actividad, organizada por el Centro Misional San José y con la colaboración de la Labor Social María Teresa de Jesús, logró unir a niños, vecinos y adultos en una jornada llena de diversión y solidaridad.
La jornada comenzó con la emocionante parranda de los niños de la comunidad, quienes se vistieron como los Tres Reyes Magos y recorrieron las calles de Sorocaima, llevando consigo golosinas y refrigerios para compartir con todos los presentes. El ambiente festivo y la música tradicional de la parranda crearon un ambiente mágico y lleno de alegría.
Pero la verdadera sorpresa llegó cuando los Reyes Magos hicieron su aparición, acompañados por los niños y vecinos de la comunidad. Cargados con juguetes, los Reyes Magos se acercaron a los niños presente, entregando regalos y sonrisas. Esta hermosa labor fue posible gracias a la generosa donación de juguetes realizada por María Teresa de Jesús, quien se destacó por su compromiso con la labor social en la comunidad.
El Centro Misional San José y Ronald González fueron los encargados de coordinar y organizar este evento. Su labor y su dedicación lograron armonizar a niños y adultos, creando un ambiente de unión y solidaridad en la comunidad de Sorocaima.
“Estamos muy emocionados de poder celebrar nuevamente la llegada de los Reyes Magos en nuestra comunidad. Es un momento mágico en el que todos nos unimos para llevar alegría a los niños y recordar el verdadero significado de la Navidad”, expresó González.
La comunidad Sorocaima agradeció a los involucrados en esta iniciativa, que no solo trae felicidad a los niños, sino que también fortalece los lazos comunitarios y promueve la solidaridad entre sus habitantes.
Con esta celebración, Sorocaima cerró con broche de oro las festividades navideñas, recordando el nacimiento del salvador del mundo y compartiendo amor y alegría con todos sus habitantes.