Autoridades mexicanas elevaron a 12 el número de presuntos delincuentes abatidos tras una persecución y enfrentamiento en el estado mexicano de Sonora (noroeste), que dejó también dos policías heridos, informó este domingo la fiscalía estatal.
La refriega tuvo lugar la tarde del sábado en una carretera cercana a Hermosillo, la capital del estado, cuando los desconocidos dispararon contra agentes de la policía de investigación, detalló la dependencia en un comunicado divulgado la noche del sábado.
La agresión dio lugar a una persecución a “diversos vehículos tripulados por civiles armados” que “al sentirse acorralados” atacaron a los policías en el área conocida como Siete Cerros, precisa el boletín.
“Como consecuencia de las acciones previamente mencionadas, 12 delincuentes fueron neutralizados y siete lograron escapar, algunos de los cuales se presume que están heridos. Además, dos elementos de la Agencia Ministerial de Investigación Criminal resultaron lesionados”, señaló la fiscalía en otra nota este domingo.
Una portavoz de la fiscalía de Sonora confirmó a la AFP que el término “neutralizados” indica que los agresores resultaron muertos en el enfrentamiento.
Las investigaciones apuntan a que los atacantes tenían como objetivo rescatar a un individuo identificado como Carlos Humberto “N”, hijo de Jesús Humberto “N”, alias Chubeto, “quien era uno de los principales generadores de violencia al norte del país”, añade la fiscalía en el boletín.
La persecución y balacera provocó pánico entre personas que circulaban por la carretera al momento de la persecución, según reportes de la prensa local.
Tras la refriega, las autoridades incautaron seis camionetas, 21 fusiles de asalto de diversos calibres, cargadores, chalecos balísticos, cascos y vestimenta de camuflaje.
Sonora, un vasto estado fronterizo con Estados Unidos, es una de las rutas que el crimen organizado utiliza para el tráfico de drogas, pero también para el cruce de migrantes indocumentados.
Desde finales de 2006, en México se contabilizan más de 420.000 asesinatos, la mayoría relacionados con la lucha contra el narcotráfico y con ajustes de cuentas entre criminales, según el gobierno.
AFP