Todos nos vamos a topar con unos cuantos compañeros de trabajo negativos a lo largo de nuestras vidas. Son personas que siempre ven el vaso medio vacío, que se enfocan en las cosas que salen mal, constantemente se quejan o parecen no tener ganas de disfrutar de la vida, y el mayor problema es que la negatividad se contagia y se puede ir esparciendo si no se ponen límites.
Por GQ
De acuerdo con Indeed.com, hay dos tipos de personas negativas (y ahí entran los vampiros de energía también) en los trabajos, las crónicas, que pueden tener problemas tanto fuera como dentro del trabajo, no tienen una visión positiva al respecto y lo demuestra a diario. Luego están las ocasionales, que pueden actuar de manera negativa de vez en cuando, pero por un periodo corto de tiempo.
Las personas que son ocasionalmente negativas no son tan dañinas, todos podemos ser una y esto se puede conectar, por ejemplo, con un proyecto difícil o un momento de mucho estrés, pero la negatividad crónica sí puede ser un problema grave y puede llegar a afectar la concentración, la satisfacción e incluso la productividad de todos los demás.
Aunque las personas que son crónicamente negativas no van a dejar de serlo fácilmente, hay cosas que puedes hacer para protegerte de esa negatividad y mantener una energía más positiva, que te mantenga motivado, más feliz y en paz.
Los compañeros de trabajo negativos y cómo lidiar con ellos
Una práctica de gratitud
Ser una persona agradecida te ayuda a mantener un mejor estado de ánimo, a apreciar más tu vida y logros, es bueno para tu salud mental, para la motivación, la productividad o incluso puede ser uno de los elementos clave de la longevidad y la buena calidad de vida.
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