El Comité de Usuarios de los Servicios Públicos del Táchira denunció que la entidad retrocedió a la época de las cavernas y las totumas, ante la grave escasez de agua y severos racionamientos eléctricos.
Por Anggy Polanco / Corresponsalía lapatilla.com
Yajaira Hómez, representante del comité, expuso que en los últimos meses las empresas encargadas de los servicios públicos en Táchira, han hundido a los habitantes en un abismo.
Hidrosuroeste, que anunció un plan de racionamiento de agua, no está cumpliendo ni con el cronograma que ellos mismos crearon, dejando a las comunidades con unas pocas horas de agua cada dos días.
Según el plan publicado por la empresa hidrológica, los racionamientos serían de 24 horas sin agua por 24 horas con agua, pero a las comunidades les abren la llave unas 4 horas cada 24 o 48 horas, incluso, en algunas zonas llevan hasta 72 horas sin el servicio.
“Yo resido en un sector popular, en La Ermita, desde donde pasamos dos días continuos sin el vital líquido. El agua es un derecho humano de todos y que debe prevalecer”, apuntó.
Adicionalmente, cuando abastecen de agua, no tiene la suficiente presión, por lo que “volvimos a los tiempos de antes: nos tenemos que bañar con una tacita, porque el agua no tiene fuerza, volvimos a los tiempos de la totuma”.
Cantv en diciembre estaba cobrando 765 bolívares mensuales “¿cómo una persona que vive de una pensión o jubilada puede pagar ese servicio?”
Si se habla de Corpoelec, dijo Hómez, inventó el cobro de 1.000 bolívares tras el Plan Borrón y Cuenta Nueva, sin una respuesta y explicación oportuna para los usuarios.
“Nos violentan nuestros derechos a los ciudadanos que necesitamos de estos servicios básicos”, expresó.
Recordó que el Estado es responsable de garantizarle al ciudadano servicios públicos óptimos.
“Quiero levantar la voz para exigirle a las autoridades competentes de los organismos nacionales y regionales para que hagan una revisión a la problemática”, pidió.
La integrante del citado comité, que se creó hace pocos meses, expresó su preocupación por la apatía de los ciudadanos, pese a que sufren en carne propia las fallas en los servicios.
“Viven una especie de conformismo, una especie de apatía, como si eso no les afectara”, manifestó. Por eso exhortó a la comunidad tachirense a que reaccionen y se sumen a la organización que promueve la defensa de los derechos a los servicios públicos.