Ela Ferris: El 8 de Marzo y el Desafío de las Mujeres

Ela Ferris: El 8 de Marzo y el Desafío de las Mujeres

El Día Internacional de la Mujer es una fecha donde todas las mujeres de todos los continentes, a menudo separadas por fronteras nacionales y diferencias étnicas, lingüísticas, culturales, económicas y políticas, nos unimos en ocasión de conmemorar y concientizar los logros sociales, económicos, culturales y políticos a través de los años y al mismo tiempo enfrentar los desafíos que aún persisten en la búsqueda de la igualdad y la equidad…

Las mujeres somos artífices de la historia y a la vez somos las que vamos rompiendo barreras y abriendo camino para futuras generaciones. El 8 de marzo tiene sus incios en los movimientos obreros y feministas del siglo XIX y principios del siglo XX, como una respuesta a las desiguales e injustas condiciones laborales así como a la falta de derechos políticos y discriminación.





Hoy, más que hablar del pasado, hablemos del gran trabajo que tenemos por delante. Por mencionar algunos aspectos, tenemos que para el año 2030, se estima que 342 millones de mujeres y niñas podrían estar viviendo por debajo del umbral de la pobreza, que por cada dólar que ganan los hombres a nivel mundial, las mujeres ganan 51 centavos de dólar, también, que 72 países no garantizan bajas por maternidad, que 149 países no prohíben, es decir permiten el despido de trabajadora embarazadas, que 43 de estos países no garantizan la igualdad de sucesión entre hombres y mujeres y 41 países más, no garantizan a las hijas los mismos derechos sucesorales que a los hijos. Garantizar los
derechos de las mujeres y las niñas en todos los ámbitos de la vida es la única forma de asegurar el desarrollo sostenible para futuras generaciones.

En Venezuela, no escapamos a estas variables para lograr la igualdad, pero tenemos encima el factor de crisis humanitaria y política que vivimos en la actualidad. El tiempo es ya, tenemos todas que entender que primordialmente la unidad es lo que nos permitirá avanzar en la igualdad como imperativo desde la perspectiva de derechos humanos e inclusión.

Las venezolanas hemos sido de alguna manera víctimas de la crisis, bien sea por el desempleo, por la diáspora, por la crisis humanitaria y política, haciendo mención especial a las mujeres vulnerables, con discapacidad, indígenas, mujeres de las zonas rurales, a las familias separadas, hijas en la diáspora, madres y abuelas viviendo solas en Venezuela, así como la dramática trata con fines de explotación sexual y laboral que sufren las venezolanas acentuada por la crisis.

Urgen políticas públicas que nos permitan una sociedad de cuidados, de sostenibilidad equitativa, para poder liderar la lucha contra la pobreza y la desigualdad en todos los aspectos. Tenemos a la vuelta de la esquina una elección presidencial, dónde las mujeres somos las protagonistas.

Aprovechemos este momento de lucha, de unidad, para transformar los retos y los desafíos en oportunidades, porque “Cuando una mujer avanza, ningún hombre retrocede”.