El gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, firmó este viernes tres proyectos de ley diseñados para combatir la inmigración irregular y reiteró su intención de reforzar la frontera para frenar la previsible llegada de una “oleada” de migrantes haitianos.
En una rueda de prensa, el gobernador insistió en el despliegue de más de 250 efectivos de dependencias estatales al sur del estado y los cayos, y señaló que desde enero de 2023 fuerzas estatales han colaborado con la Guardia Costera en la detención de 670 embarcaciones con 13.500 “inmigrantes ilegales” a bordo.
“Tenemos mucha más capacidad para detenernos en el mar”, dijo DeSantis hoy, quien agregó que la idea es “devolverlos” antes que pisen tierra en suelo estadounidense.
El anuncio del gobernador mereció la crítica de organizaciones civiles del sur de Florida, donde se asienta la comunidad de haitianos más grande en EE.UU., y quienes frente a la crisis que afronta la nación caribeña pidieron una “respuesta compasiva” antes que una “militarizacióón” de la frontera.
El gobernador además firmó hoy tres proyectos de ley con los que busca atajar la inmigración, uno de los cuales prohíbe a los gobiernos locales aceptar como documentos de identidad las llamadas tarjetas comunitarias, muy usadas por los extranjeros sin papeles.
Otro proyecto, el HB 1589, aumenta las sanciones por conducir sin una licencia válida y establece penas carcelarias de al menos diez días para los reincidentes, una medida que servirá como “un elemento disuasorio para la inmigración ilegal en el estado de Florida”, dijo este viernes DeSantis.
Finalmente, el SB 1036 aumenta las penas a un individuo que ha cometido un delito y había sido deportado, además de reforzar las penas para quienes brinden apoyo a los cárteles de la droga. EFE