Uno de los animales que más daños provocan y que pueden propagar enfermedades son los ratones. Generalmente, entran a las viviendas en búsqueda de calor, refugio y comida. Existen muchas formas en la que estos ratones pueden meterse, desde grietas, agujeros, tuberías o conductos de ventilación, entre otras muchas zonas por las que les es posible ingresar.
Por semana.com
Pero la pesadilla inicia con su rápida reproducción, que en ocasiones genera plagas en cuestión de meses, por lo que es importante adoptar estrategias tendientes a ahuyentar a estos animales.
Dentro de las opciones más comunes está el uso de venenos a base de químicos que se comercializan en el mercado. Adicionalmente, existen otros productos y métodos que también pueden tener efectos positivos en este objetivo. La plataforma WikiHow reveló algunas recomendaciones:
Adopta un gato: estos animales son “depredadores naturales de los ratones”, y en muchos casos, su presencia puede representar control en la vivienda. “Sin importar dónde se queden, afuera o adentro, son excelentes para evitar los ratones”.
Plantas como repelentes naturales: en los lugares donde existe la posibilidad de que haya roedores, lo mejor será recurrir a la vegetación. Entre las opciones se destacan la menta, las hojas de laurel y las bolas de naftalina.
Trampas en el exterior de la casa: los ratones deben ser atraídos con algo dulce con ayuda de las trampas tradicionales, como por ejemplo las de resorte o pegamento.
Por su parte, una forma de evitar o prevenir el ingreso de estos animales al interior de la vivienda es cerrando la puerta principal o del garaje, ya que estos animales utilizan su audacia y agilidad para ingresar cuando no los ven. “Los ratones son más activos en la noche, así que es mejor no dejar las puertas abiertas en esa jornada”.
A su vez, si es de la preferencia de cada persona, durante el verano es posible dejar la puerta abierta siempre y cuando se instale una malla, así los roedores no podrán ingresar y el aire seguirá fluyendo al interior de la casa.