David DePape, el hombre que agredió al marido de la expresidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, ha sido condenado este viernes a 30 años de cárcel. Los fiscales habían solicitado 40 años de prisión, y la propia Pelosi había pedido por carta al tribunal que dictara una condena «muy larga» para el atacante. «Paul y yo no hemos hablado de los acontecimientos de esa horrible noche», reconoce la veterana dirigente demócrata en la misiva. «Paul no quiere someterse a revisitarlo, y el consejo de los médicos es que discutir el vicioso asalto sólo renovaría su trauma».
Por: La Razón
En su propia carta al tribunal antes de la sentencia, su marido, Paul Pelosi, confesó estar todavía luchando con los efectos del ataque: «Camino despacio y tengo dificultades para mantener el equilibrio. Casi todos los días tengo dolores de cabeza que se convierten en migrañas si no se tratan rápidamente. Necesito dormir durante el día y no tolero las luces brillantes ni los ruidos fuertes durante periodos prolongados». DePape fue declarado culpable de irrumpir en el domicilio del matrimonio en San Francisco y atacar con un martillo a Paul Pelosi. El hombre de 84 años pasó seis días hospitalizado con fractura de cráneo y otras lesiones como consecuencia de la brutal agresión.
En el momento del ataque, en octubre de 2022, la líder demócrata era la segunda en la línea de sucesión a la Presidencia y blanco habitual de las teorías conspirativas de la extrema derecha trumpista. Los miembros del jurado escucharon cómo DePape, un antiguo activista nudista de nacionalidad canadiense pero residente en Estados Unidos que se mantenía con trabajos ocasionales de carpintería, había planeado inicialmente atacar a Nancy Pelosi, planeando destrozarle las rótulas si no admitía las «mentiras» de su partido. Pero la entonces speaker del Congreso no estaba en casa en la noche del ataque. La abogada de oficio de DePape, Jodi Linker, argumentó que su cliente estaba motivado por teorías de la conspiración, en las que el acusado creía «con cada gramo de su ser».
DePape también se enfrenta a cadena perpetua por otros cargos estatales derivados del ataque, entre los que figuran robo con allanamiento de morada, agresión con arma mortal, maltrato de ancianos e intento de asesinato.