Migrantes irregulares y activistas en la frontera sur de México esperan un alivio tras las elecciones del próximo domingo ante el flujo migratorio inédito en la zona y las disputas del crimen organizado.
Rafael Alegría López, activista promigrantes, pide a las autoridades que tengan en consideración a Tapachula, la mayor ciudad del límite de México con Centroamérica, que también ahora padece tiroteos y delitos que no ocurrían en el pasado.
“Siempre hemos pedido que haya controles desde la frontera, que haya más vigilancia, ya que hoy sabemos que los cárteles ya controlan esta parte del acceso de nuestro país de los migrantes, donde son marcados, separados y embarcados a diferentes ‘coyotes’ (traficantes)”, indica a EFE.
El defensor recuerda que Tapachula es epicentro del fenómeno migratorio, por lo que pide una solución al Gobierno de México, que elevó en casi 200 % anual su detección de migrantes irregulares en el primer trimestre de 2024, cuando interceptó a más de 360.000.
“Sabemos que muchos vienen buscando el progreso y el sueño americano y muchos están ya con el sueño mexicano porque se están estableciendo”, opina.
¿Cambios en migración?
En la campaña, los candidatos presidenciales de oposición, Xóchitl Gálvez y Jorge Álvarez Máynez, prometieron “orden” ante la violencia en la frontera sur y, a la vez, acusaron al Gobierno de Andrés Manuel López Obrador de “doblarse” ante las peticiones migratorias del expresidente estadounidense Donald Trump (2017-2021).
Mientras que la candidata oficialista, Claudia Sheinbaum ofreció continuidad en la política migratoria, aunque reconoció que el Instituto Nacional de Migración (INM) debe reformarse y ofreció un plan de industrialización en la frontera sur con oportunidades de empleo para convertir a Tapachula “en la capital de Centroamérica”.
Pero, ante la falta de contrastes en las propuestas, permanece la incertidumbre entre migrantes varados en la región, como el hondureño Evaristo González Alvarado.
“Hasta aquí no podemos decir nosotros si va mejorar o si van a poner más estrictas las leyes”, comenta a EFE.
Mientras las candidaturas coinciden en buscar una migración “humana“, el centroamericano alerta de las crecientes agresiones del crimen organizado.
“Por el hecho de pasar las fronteras, muchos que sufrimos mucho, somos asaltados, nos roban y cuando caemos en otros lugares, como es Tapachula, nos quedamos sin dinero o sin nada, pero le damos gracias a Dios y a las autoridades que por lo menos tenemos un resguardo de poder caminar y andar”, manifiesta.
Migrantes piden atención
La elección ocurre mientras el Gobierno afirma que México se ha consolidado como el tercer país del mundo con más peticiones de asilo, que subieron un 18,2 % en 2023 hasta un récord de 140.982, según la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar).
En este contexto, migrantes como Evaristo y su compatriota, Juan Amador Argueta, quien lleva siete meses en Tapachula, solicitan a las autoridades que agilicen la atención.
“Lo que le pediríamos es que se mejore la seguridad y siempre la atención a los migrantes, los que estamos aplicando a los papeles, mejor atención y que pronto nos den la atención, que los necesitamos, que mejoren los servicios, que sean más cortos. Lo entretienen a uno casi un año esperando”, cuenta a EFE.
A este extranjero, el 24 de mayo le negaron la resolución positiva en la Comar, por lo que ahora está con incertidumbre, pues su deseo es poder ir a Monterrey, el polo industrial del norte de México, pues ha desistido de ir a Estados Unidos.
Por los comicios que se avecinan este 2 de junio, una caravana de cientos de migrantes de Cuba, Venezuela y Centroamérica partió este viernes desde la frontera sur con la expectativa de presionar antes de las elecciones.
México tendrá las elecciones más grandes de su historia el domingo, cuando más de 98 millones de personas están convocadas a renovar 20.375 cargos, incluida la Presidencia de la República, los 500 diputados y los 128 senadores, así como nueve gobiernos estatales.
EFE