Al ingresar al Hyatt Regency on Kilbourne en Milwaukee, los huéspedes fueron recibidos con un espectáculo escalofriante apenas un día después de un intento de asesinato contra Donald Trump.
Por Mirror
La entrada sirve como un monumento al momento en el que otro presidente de los Estados Unidos casi fue asesinado en 1912: Theodore Roosevelt. Es inquietante que esté a pocas cuadras del estadio donde Donald Trump hablará el jueves por la noche en la convención del RNC en el Fiserv Forum.
Antes de ser el Hyatt, el hotel donde se hospedarán las delegaciones republicanas esta semana, era conocido como Gilpatrick Hotel, el lugar donde el expresidente Theodore Roosevelt casi fue asesinado a tiros, pero se salvó gracias a un estuche de gafas y un grueso discurso en su bolsillo delantero.
En el momento de su parada, Roosevelt buscaba un tercer mandato y se presentaba como candidato de un tercer partido. Cuando Roosevelt llegó a un acto de campaña en Milwaukee, el ex tabernero John Schrank se abrió paso entre la multitud y le apuntó con una pistola al pecho.
La bala de Schrank atravesó el pecho de Roosevelt, pero en lugar de matar al futuro presidente, la bala primero atravesó el estuche de acero de sus gafas y luego una gran copia de 50 páginas de su discurso, “la causa progresista es más grande que cualquier individuo”, que estaba en el bolsillo de su chaqueta.
Se tomaron medidas rápidas para desarmar y contener a Schrank, y el propio Roosevelt insistió en que no se debía hacer daño al aspirante a asesino. La multitud, a la que Roosevelt le aseguró que estaba bien, recibió instrucciones de no hacer daño a Schrank.
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