Los presidentes de Colombia, Gustavo Petro, y de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, sostuvieron el miércoles 14 de agosto de 2024 una nueva conversación telefónica para abordarla dura situación social y política que se registra en Venezuela; país en el que habría serias sospechas de fraude en las elecciones del domingo 28 de julio, en favor del dictador Nicolás Maduro y en detrimento de Edmundo González.
Por: Infobae
Aunque no se conoce ni la duración de este diálogo ni las conclusiones que surgieron tras el mismo, ambos mandatarios han insistido en que el diálogo entre los actores políticos, además de la divulgación de las actas de votación por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE), organismo encargado de los comicios, es el camino para superar la delicada realidad que se vive en el país vecino.
“Disculpas a ustedes, me demoré porque estaba atendiendo un llamado con Colombia, intentando encontrar una salida política para el problema de Venezuela”, indicó Lula, antes de llegar a un evento de gobierno. Este diálogo se dio al margen de la decisión del mandatario de México, Andrés López Obrador, de no establecer más contactos hasta tanto las autoridades en Venezuela no se pronuncien.
“Ahora no, porque vamos a esperar a que resuelva el Tribunal Electoral (de Venezuela)”, indicó el presidente mexicano ante el interrogante de cómo avanzarían los diálogos, luego de que el 1 y 8 de agosto, luego de encuentros virtuales, los tres países en mención insistieran en la necesidad de que las autoridades electorales en Venezuela den plenas garantías para llevar a cabo una veeduría internacional.
“Creo que el viernes de esta semana (16 de agosto) van a resolver sobre las actas y sobre los resultados. Vamos a esperar”, agregó López Obrador, como si tuviera información privilegiada del avance del panorama político en territorio venezolano. Y justo cuando las medidas represivas por parte del régimen van en aumento, no solo en las calles, sino también a nivel tecnológico.
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