El expresidente de Paraguay Mario Abdo Benítez (2018-2023) afirmó este miércoles que el “hombre más poderoso” de su país lo quiere “ver preso” luego de haber sido imputado en marzo por la presunta revelación de secretos, una acusación que es parte de la investigación abierta por una querella interpuesta por el exmandatario Horacio Cartes (2013-2018), con quien mantiene una rivalidad dentro de su partido político.
“El hombre más poderoso del Paraguay me quiere ver preso, me quiere ver fundido, me quiere ver enterrado (…) pero no lo van a conseguir”, dijo Abdo Benítez, sin mencionar un nombre, en una reunión con disidentes del oficialista Partido Colorado del que forma parte.
Abdo Benítez reapareció el domingo luego de un año de silencio tras dejar el poder y en una entrevista anunció que retoma la militancia partidaria para crear “una alternativa, un proyecto interno” que aglutine a su disidencia para defender las instituciones de Paraguay y el equilibrio democrático.
El Partido Colorado atraviesa una pugna entre dos de sus más importantes facciones: una encabezada por Abdo Benítez y otra tutelada por Cartes, el presidente del partido y mentor político del actual gobernante del país, Santiago Peña.
Abdo Benítez, considerado un adversario del oficialismo, y ocho exfuncionarios fueron imputados el pasado 11 de marzo por los presuntos delitos de revelación de secretos de servicio durante su gestión como parte de un supuesto “esquema que aspiraba a generar investigaciones penales en contra de figuras contrarias a su movimiento”, entre ellas Cartes y Peña.
A mediados del año pasado, Cartes denunció que era víctima desde 2018 -cuando Abdo Benítez llegó al Ejecutivo- de una presunta “persecución” por parte de “personas en el ejercicio del poder político”.
En ese contexto, Abdo Benitez aseguró a periodistas en la reunión de esta jornada con sus simpatizantes en la ciudad de San Bernardino, a unos 57 kilómetros de Asunción, que el coloradismo en el poder supuestamente “tenía un itinerario de venganza, de persecución”.
“No me van a frenar, a medida que me persiguen y me golpeen voy a estar más fuerte para defender los altos intereses de la nación paraguaya y del Partido Colorado”, refirió luego el exjefe de Estado en un discurso.
El día de su reaparición, Abdo Benítez dijo que Peña es “un actor secundario hasta hoy”, en alusión al supuesto padrinazgo de Cartes, y que actualmente el “mayor problema de la democracia” en Paraguay es “la falta de autonomía de la cabeza del Ejecutivo”.
“Queremos que a Paraguay y a sus autoridades les vaya bien, queremos que gobierne el presidente de la República, queremos que tenga la garantía que no es prisionero de nadie”, reiteró esta jornada en el acto partidario.
El político anunció el domingo que construiría una plataforma alternativa dentro del Partido Colorado con miras a que su facción o personas afines participen en los próximos procesos electorales.
EFE