La Guardia Revolucionaria iraní afirmó este martes que la respuesta a Israel por el asesinato del líder de Hamas, Ismail Haniyeh, en Teherán podría retrasarse, lo que deja al Estado judío en una situación de incertidumbre.
“El tiempo está de nuestra parte y el periodo de espera a la respuesta podría alargarse”, dijo el portavoz de la Guardia Revolucionaria, el general de brigada Ali Mohammad Naeini.
El militar aseguró que Israel debe encontrarse en “un estado de incertidumbre” a la espera de la respuesta por la muerte de Haniyeh a finales de julio en Teherán, donde asistió a la investidura del presidente iraní, Masud Pezeshkian.
A la vez, advirtió que la represalia no tiene que ser similar a otras anteriores, como el ataque directo con drones y misiles de abril, que fue una respuesta a la muerte de siete miembros de la Guardia Revolucionaria en el consulado iraní en Damasco, ataque del que Teherán responsabilizó a Tel Aviv.
“La respuesta de Irán podría no ser una repetición de operaciones anteriores y los escenarios de respuesta no son los mismos, y nuestros comandantes tienen la experiencia y el arte de castigar de manera efectiva al enemigo”, dijo Naeini.
Tras el asesinato de Haniyeh, Teherán prometió venganza contra Tel Aviv, que no ha confirmado la acción, y países como Estados Unidos avisaron que la represalia podía ser “inminente”, aunque aún no se ha producido.
El portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Naser Kananí, reiteró ayer el derecho de Teherán a “castigar” a Israel, pero aseguró que no busca aumentar las tensiones en la región.
Kananí además aseguró que la represalia iraní contra Israel y las negociaciones entre el Estado judío y Hamás para alcanzar una tregua son asuntos separados, después de que algunos analistas apuntasen que Teherán podría esperar a la firma de un alto el fuego.
La República Islámica de Irán capitanea el llamado ‘Eje de la Resistencia’, una alianza informal antiisraelí, integrada por Hamas, Hizbulá del Líbano y los hutíes de Yemen, entre otros.
EFE