La Fuerza de la No Violencia: Caminos hacia la Libertad, por José Ignacio Gerbasi

La Fuerza de la No Violencia: Caminos hacia la Libertad, por José Ignacio Gerbasi

En estos tiempos de desafíos y adversidades, es crucial recordar que la lucha por la libertad y la democracia nunca ha sido fácil, pero siempre ha sido necesaria. Nuestra querida líder, María Corina Machado, ha demostrado una y otra vez su compromiso inquebrantable con la causa de Venezuela. Cada paso que hemos dado juntos ha sido un testimonio de nuestra fuerza colectiva y nuestra determinación.

María Corina nos ha guiado con valentía y visión, y todo lo que nos ha prometido se ha cumplido. Su liderazgo nos ha llevado a alcanzar hitos fundamentales, como la reciente protesta mundial que unió a venezolanos dentro y fuera del país en una sola voz poderosa. Este es solo el comienzo de una nueva etapa en nuestra lucha.

Es natural sentir cansancio y desánimo en el camino, pero debemos recordar que cada sacrificio, cada esfuerzo, nos acerca un poco más a la libertad que tanto anhelamos. La historia está llena de ejemplos de pueblos que, con paciencia y perseverancia, lograron superar las más grandes adversidades. Nosotros no seremos la excepción.





La lucha por la libertad de Venezuela es una causa mundial.  Ciudadanos de todo el mundo han asumido la trascendencia de nuestra lucha y nos acompañarán hasta el final. No estamos solos. Cada día que pasa, nuestra fuerza aumenta y nuestra determinación se fortalece.

Les dejos algunos ejemplos de algunos regímenes que parecían fuertes pero que, en realidad, estaban más débiles de lo que se pensaba:

  • La caída del Muro de Berlín (1989): El régimen comunista en Alemania Oriental parecía sólido, pero la presión interna y externa llevó a su colapso. La caída del Muro de Berlín simbolizó el fin de la división y el inicio de la reunificación alemana, mostrando que el régimen estaba más débil de lo que parecía.

  • La Revolución de los Claveles en Portugal (1974): El régimen autoritario de António de Oliveira Salazar y su sucesor Marcelo Caetano parecía inquebrantable. Sin embargo, un golpe militar pacífico, conocido como la Revolución de los Claveles, derrocó al régimen en cuestión de horas, revelando su verdadera fragilidad.

  • La Primavera de Praga (1968): Aunque el régimen comunista en Checoslovaquia parecía fuerte, las reformas liberales impulsadas por Alexander Dub?ek revelaron un deseo profundo de cambio. Aunque la intervención soviética sofocó temporalmente el movimiento, la Primavera de Praga demostró que el régimen no era tan sólido como se pensaba.

  • La Revolución Egipcia (2011): El régimen de Hosni Mubarak en Egipto parecía estable, pero las protestas masivas durante la Primavera Árabe revelaron un descontento generalizado. En solo 18 días, Mubarak fue obligado a renunciar, mostrando la debilidad del régimen frente a la voluntad del pueblo.

Estos ejemplos nos enseñan que, aunque los regímenes autoritarios puedan parecer fuertes, a menudo están sostenidos por estructuras frágiles y un descontento latente. 

La unión, la constancia y la confianza en nuestros líderes pueden revelar y aprovechar estas debilidades para lograr el cambio.

Hay otros ejemplos importantes de como en paz y sin violencia se lograron los objetivos: 

  • Nelson Mandela y el Apartheid en Sudáfrica: Nelson Mandela es un símbolo mundial de la lucha por la libertad y la democracia. Pasó 27 años en prisión por su oposición al régimen del apartheid en Sudáfrica. Su liberación en 1990 y su posterior elección como el primer presidente negro de Sudáfrica en 1994 marcaron el fin del apartheid y el inicio de una nueva era democrática.

  • La Primavera Árabe: A partir de 2010, una serie de protestas y levantamientos en el mundo árabe, conocida como la Primavera Árabe, buscó derrocar regímenes autoritarios y establecer sistemas democráticos. Aunque los resultados han sido mixtos, en países como Túnez se lograron avances significativos hacia la democratización.

  • Lucha por la democracia en América Latina: En América Latina, muchos países han pasado por procesos de democratización después de períodos de dictaduras militares. Por ejemplo, en Chile, la dictadura de Pinochet terminó en 1990, dando paso a un proceso democrático que ha continuado hasta hoy.

  • Movimientos pro-democracia en Hong Kong: En los últimos años, los ciudadanos de Hong Kong han llevado a cabo protestas masivas para defender sus derechos y libertades frente a la creciente influencia de China. Aunque enfrentan grandes desafíos, su persistencia es un testimonio del poder de la resistencia pacífica.

  • Movimiento Solidarity en Polonia: En la década de 1980, el sindicato Solidaridad, liderado por Lech Wa??sa, jugó un papel crucial en la lucha contra el régimen comunista en Polonia. A través de huelgas y protestas pacíficas, Solidaridad logró negociar la transición hacia un gobierno democrático en 1989.

  • Revolución de Terciopelo en Checoslovaquia: En 1989, una serie de protestas pacíficas en Checoslovaquia llevaron al fin del régimen comunista en el país. Este movimiento, conocido como la Revolución de Terciopelo, resultó en la transición pacífica hacia la democracia y la eventual división pacífica del país en la República Checa y Eslovaquia.

  • Lucha por los derechos civiles en Estados Unidos: El movimiento por los derechos civiles en los Estados Unidos durante las décadas de 1950 y 1960, liderado por figuras como Martin Luther King Jr., buscó acabar con la segregación racial y garantizar los derechos civiles y políticos para todos los ciudadanos. Este movimiento logró importantes avances legislativos, como la Ley de Derechos Civiles de 1964 y la Ley de Derecho al Voto de 1965.

  • Revolución Naranja en Ucrania: En 2004, una serie de protestas masivas conocidas como la Revolución Naranja se llevaron a cabo en Ucrania en respuesta a las elecciones presidenciales fraudulentas. Estas protestas resultaron en la anulación de los resultados electorales y la realización de nuevas elecciones, que llevaron a la victoria del candidato pro-democracia Viktor Yushchenko.

Estos ejemplos muestran algo en común , que aunque el camino hacia la democracia puede ser largo y difícil, la perseverancia y la lucha constante pueden llevar a cambios significativos. Es importante recordar que cada pequeño paso cuenta y que la historia está llena de ejemplos de personas que, a pesar de las adversidades, lograron transformar sus sociedades.

La historia nos ha enseñado que la constancia, la unión y la confianza en nuestros líderes son las claves para alcanzar la libertad. Desde Nelson Mandela en Sudáfrica hasta el movimiento Solidarity en Polonia, cada lucha por la democracia ha sido un testimonio del poder de la perseverancia y la fuerza colectiva.

Hoy, en Venezuela, enfrentamos nuestra propia batalla por la libertad. María Corina Machado nos ha demostrado que, con determinación y valentía, podemos superar cualquier obstáculo. Su liderazgo nos ha guiado en momentos de oscuridad y nos ha mostrado que un futuro mejor es posible.

También demuestran que la lucha por la democracia puede tomar muchas formas y que, a pesar de los desafíos, es posible lograr cambios significativos a través de la perseverancia y la acción colectiva. La historia está llena de ejemplos de personas y movimientos que, con determinación y coraje, han logrado transformar sus sociedades para mejor.

Sigamos adelante con la misma determinación que nos ha traído hasta aquí. Mantengamos la esperanza viva en nuestros corazones y la convicción de que, juntos, lograremos un futuro mejor y en paz para nuestra amada Venezuela. La libertad está a nuestro alcance, y con María Corina Machado liderando el camino, sabemos que es posible.

Es en los momentos más difíciles cuando debemos recordar que no estamos solos. Cada uno de nosotros es una pieza fundamental en esta lucha. Juntos, somos más fuertes. Juntos, podemos lograr lo que parece imposible.

Mantengamos la esperanza viva y sigamos adelante con la misma determinación que nos ha traído hasta aquí. La libertad no es un sueño lejano; es una realidad que construiremos con cada paso que demos, con cada voz que se alce y con cada acto de valentía.

En estos momentos cruciales, es vital recordar que la verdadera fortaleza de un movimiento reside en su capacidad para mantenerse unido, constante y pacífico. La historia nos ha mostrado que incluso los regímenes que parecen invencibles pueden ser más frágiles de lo que aparentan. La caída del Muro de Berlín, la Revolución de los Claveles en Portugal y la Primavera Árabe son ejemplos de cómo la perseverancia y la unión pueden desmantelar estructuras opresivas. En Venezuela, nuestra lucha por la libertad, liderada por figuras valientes como María Corina Machado, no es diferente. Debemos mantenernos firmes en nuestro compromiso con la no violencia activa, inspirándonos en líderes como Mahatma Gandhi, quien demostró que la resistencia pacífica puede derribar los muros más altos. La esperanza es nuestra arma más poderosa, y con ella, lograremos construir un futuro democrático y justo para todos.

¡Adelante, Venezuela! La victoria es nuestra.

Jose I Gerbasi P.