El presidente de Colombia, Gustavo Petro, criticó este martes, sin citarlo, a su homólogo argentino, Javier Milei, y su lema “Viva la libertad, carajo”, al hablar ante la Asamblea General de la ONU del sometimiento de la política al poder de los más ricos.
“Los políticos, incluidos los presidentes de los países más poderosos de la tierra, simplemente les obedecen. Ellos pagan las campañas, ellos son los dueños de los medios de comunicación, ellos son los que ocultan la verdad de la ciencia, como en la película ‘No mires arriba’, manifestó, refiriéndose al poder político, al 1 % más rico del mundo.
Petro, que ha tenido varios rifirrafes con Milei, dijo que los ricos son “los que dicen qué se piensa, qué se dice y qué debe ser prohibido y silenciado”.
“En su poder de prohibición y censura gritan ‘Viva la libertad, carajo’, pero es solo la libertad del 1 % más rico de la población mundial que en su sentir mercantil y libre nos lleva a la destrucción de la atmósfera y de la vida”, manifestó.
En marzo pasado el Gobierno colombiano ordenó la expulsión de diplomáticos de la Embajada de Argentina en Bogotá, en respuesta a las reiteradas ofensas de Milei a Petro, a quien tildó de “asesino terrorista”.
Esa medida, revocada semanas después, fue el colofón de una serie de ofensas del mandatario argentino, que en enero de este año también llevó al Gobierno de Colombia a llamar a consultas a su embajador en Buenos Aires, Camilo Romero, luego de que Milei dijera que Petro “es un comunista asesino que está hundiendo” al país.
En su tercer discurso ante las Asamblea General de Naciones Unidas, Petro vaticinó hoy que “ha comenzado el fin” de la Humanidad por el “genocidio” en Gaza, las guerras y el cambio climático que ha provocado que 11 millones de hectáreas de la selva amazónica se hayan quemado en tan solo un mes por el calentamiento global.
Igualmente lamentó que los organismos internacionales solo escuchen a los países ricos, aunque los pobres sean la mayoría.
“En este recinto, la capacidad de comunicación de un presidente depende de la cantidad de dólares que tenga en su presupuesto, en la cantidad que tenga de aviones de guerra y, en el fondo, en la capacidad que tenga su país de destrucción sobre la humanidad”, agregó. EFE