Uno de los acusados de violar a Gisèle Pelicot lanzó insólito testimonio al afirmar que también fue drogado

Uno de los acusados de violar a Gisèle Pelicot lanzó insólito testimonio al afirmar que también fue drogado

Gisele Pelicot abandona la sala durante una pausa en el juicio de su expareja Dominique Pelicot acusado de drogarla durante casi diez años e invitar a desconocidos a violarla en su casa de Mazan, un pequeño pueblo del sur de Francia, en Aviñón. (Foto de Miguel MEDINA/AFP)

 

 

Jean T., acusado de violar a Gisèle Pelicot en Francia, aseguró este jueves que no recuerda nada y que, al igual que la víctima, el marido de esta mujer de 71 años, Dominique Pelicot, lo habría drogado.





“El señor Pelicot me drogó porque me ofreció algo de beber”, aseguró este extechador de 52 años ante el tribunal de Aviñón, en el sur de Francia.

¿Por qué no presentó una denuncia si estima que le drogaron?, le preguntó el tribunal. “Fue un mal encuentro. Te olvidas de todo y se acabó”, respondió.

Dominique Pelicot está siendo juzgado desde el 2 de septiembre, junto a 50 hombres más, por drogar a escondidas entre 2011 y 2020 a su entonces esposa para violarla junto a decenas de desconocidos.

“Bill”, el pseudónimo de Jean T. en el sitio Coco.fr en el que contactó con el marido de Gisèle, es uno de los pocos acusados que acudieron de día al domicilio de los Pelicot en Mazan, en el sur de Francia.

“Nunca me dijo que su mujer estaba dormida, drogada y que yo venía a violarla”, se defendió este jueves, una postura que rechazó rápidamente el principal acusado: “Lo sabían todos”, reiteró.

En las casi 10 escenas grabadas por el marido ese 21 de septiembre de 2018, Gisèle Pelicot parece roncar. En una de ellas, Jean T. levanta el pulgar como muestra de satisfacción, en dirección a la cámara.

Ante el tribunal, el acusado aseguró que desconocía que los hechos estaban siendo grabados y que se dio cuenta de lo ocurrido cuando los investigadores le mostraron los videos tras su detención.

Aunque durante el juicio aseguró que no recuerda nada de los hechos, sí pudo describir con detalle el ‘modus operandi’ del marido: aparcar lejos, entrar en casa por el patio y desnudarse en la cocina.

Preguntado por si solicitó el consentimiento a Gisèle Pelicot, respondió que “en las relaciones libertinas en general, son los hombres quienes hablan”, “la mujer siempre espera”.

Sus declaraciones provocaron una cara de desdén de la víctima que, desde el inicio del juicio, defiende que nunca dio su consentimiento ni a su marido ni a ninguno de los acusados y que desconocía los hechos.

AFP